Hemos tenido en el campo algunos invitados especiales. Entre ellos, alguien a quien teníamos muchas ganas de conocer personalmente, pues ya a través de su blog
sabiamos qué tipo de persona era, nos caía muy bien y nos parecía -no son flores de papel, sino flores de verdad- un joven inteligente, con gran sentido del humor y bastante más sensatez de lo común. Hablo de Mameluco, que vino a Murcia por razones de trabajo. Quedamos en la plaza del Cardenal Belluga, nos encontramos y, como él mismo dijo, como si nos conociéramos de toda la vida. Fuimos al campo y charlamos largamente. Me quedé con la pena de no haberle hecho una cena especial, algo más elaborado, pero lo que había, en tan buena compaña, con el fresquito de la noche, estuvo bien. No hice fotos del evento, no sé por qué. Quizás porque era mejor hablar que hacer fotos. Como suele ocurrir con las personas que te caen bien y con las que congenias, pese a diferencias de edad o de situación, se quedaron muchas cosas por hablar, así que espero que sea el principio de una larga amistad.
