04 diciembre 2008

Dedicatoria

Olvidé decir que estos eran días muy sensibles para mí. No, no son días buenos, sino llenos de melancolía y recuerdos. Además, sigue haciendo mucho frío, un helor inusitado en esta ciudad. Vamos a seguir añadiendo penas. Hoy, para más tristeza, han matado a un hombre en el País Vasco, y ya duele que esto siga, y siga, sin remedio. No sé si creer a los políticos que dicen que ya esto se acaba y que el fin está cerca. Lo he oído demasiadas veces, desde hace demasiado tiempo.


El lunes, día 1 de diciembre, hizo exactamente un año de la muerte de mi padre. Era pintor y se subía a andamios como ese en el que está, en torno a los treinta años, pintando en una iglesia. Un cuadro de ánimas, por el cual algunos feligreses se ofendieron, porque las ánimas, qué iban a hacer las pobres, no llevaban ropa. Válgame, qué tiempos.

Mi padre tenía muy buen humor, a veces un poco sarcástico, siempre irónico. En Yecla, a donde fui en viaje sentimental, después de su muerte, me contó Miguel Ortuño, uno de sus mejores amigos, que mi padre se subía un tocadiscos, de esos que se llamaban picús, a los andamios de los altos techos de la Basílica donde estaba pintando, y que ponía ópera y canciones napolitanas de Mario Lanza y otros tenores de moda. Unas señoras beatas que iban todas las tardes creyeron que era mi padre el que cantaba y cuando bajó del andamio le alabaron mucho su bel canto. Mi padre captó enseguida la idea y no las sacó de su error; les dio las gracias con humildad, diciéndoles que era un simple aficionado, y les rogó que no se lo dijeran a nadie, porque se iba a llenar la Basílica de gente y al cura no le iba a gustar tanta romería de aficionados a la ópera. Se fueron tan convencidas, en el secreto con el pintor, y volvían todas las tardes a "escucharlo".


Si se dispone de unos minutos, recomiendo oír esta canción, encarecidamente.

Uno de mis mejores consuelos en aquellos días luctuosos fue la música. Para él la música era algo imprescindible. Le gustaban la ópera y las canciones. Yo heredé ese gusto de él. Y le gustaba Kiri Te Kanawa. Por eso, aparte mi afición, yo estaba tan contenta de ir a oírla en directo. Os puedo asegurar que fue una maravilla, pero que me estuve acordando mucho de mi padre. Hubiera dado cualquier cosa por que pudiera oír la delicada voz de esta mujer, que además, vista de cerca, con unos prismáticos, parece mucho más hermosa y joven que en las fotografías. La canción de Richard Strauss que os dejo aquí interpretada por la soprano neozelandesa es la que estuve oyendo durante meses, una vez tras otra, con lágrimas en los ojos, con el corazón encogido. No la cantó en el recital de anoche, pero esa canción la llevo yo dentro de mí. Se llama "Zueignung", es decir, "Dedicatoria". Dedicada a todas las personas sensibles. Dedicada al recuerdo de mi padre.

Zueignung
Ja, du weißt es, teure Seele,
Daß ich fern von dir mich quäle,
Liebe macht die Herzen krank,
Habe Dank.

Einst hielt ich, der Freiheit Zecher,
Hoch den Amethysten-Becher,
Und du segnetest den Trank,
Habe Dank.

Und beschworst darin die Bösen,
Bis ich, was ich nie gewesen,
heilig, heilig an's Herz dir sank,
Habe Dank.

DEDICATORIA

Sí, tú lo sabes, alma querida,
que me atormenta el estar lejos de ti.
El amor hace enfermar el corazón.
¡Te doy las gracias!

Una vez yo alcé bien alto, borracho de libertad,
la copa de amatista
y tú bendeciste la libación.
¡Te doy las gracias!

Y exorcizaste así los demonios
a fin que yo, como jamás antes lo había estado,
santificado, santificado, cayera sobre tu corazón.
¡Te doy las gracias!



29 comentarios:

Fernando Manero dijo...

Asociar la música al recuerdo de los seres queridos ayuda a fortalecer la memoria y a valorar mejor lo que su presencia significó para nosotros. Comprendo perfectamente tu estado de ánimo y la emoción que sientes cuando oyes interpretar la música cantada, que te lleva además a esa anécdota tan divertida, digna de una escena de las buenas del cine italiano. Si algún guionista te lee, cuidado, que te la copia. Un año es muy poco tiempo para superar el dolor de una pérdida tan triste. El hecho ha coincidido con el concierto de Kiri y ha venido a sumar placer y memoria a las vivencias de un momento sensible de tu vida. Emociona ver y oir el video que nos sugieres. Inunda el aire y obliga al silencio y a la escucha reposados. Crea un ambiente placentero, en el que lo que ocurrió hace poco y las sensaciones de hoy se entremezclan para crear una experiencia que sin duda dejará huella. Un abrazo

PMM dijo...

Sé perfectamente lo que sientes. Mi madre falleció hace 10 meses, y aún no puedo superar esa sensación de vacío que me acompaña desde entonces. Pero al mismo tiempo que me entristece también me llena hacer esas cosas que a ella le gustaban, o llevar puesto algo suyo.

Cyd Charisse dijo...

Son malos días, clares, lo sé bien, mi padre murió hace casi siete años y ese dolor no se supera nunca. Pero tú tienes un no sé si llamarlo 'valor' añadido y es que tu padre fue uno de los más grandes pintores que ha dado la Región de Murcia y su obra quedará ahí, en la memoria colectiva, por los siglos de los siglos. No sé si eso aminora el dolor, supongo que no, pero procura un poco de consuelo saber que su huella no se ha borrado y que sus pinturas siguen emocionando a todo aquél que las contempla.

Eme (Nada que ver con eme dj)) dijo...

Míralo por el lado positivo, por lo menos has podido disfrutar de su presencia hasta el año pasado. Yo lo tuve menos tiempo , el mío murió cuando yo tenía 17 años. Besos

Joselu dijo...

Mi padre murió ahora hace diecisiete años. Mis hijas, sus nietas, no lo conocieron, pero especialmente la pequeña tiene verdadera devoción por el abuelo Marino. En su habitación aparecen varias fotos de él y siempre que puede nos lo recuerda. Hay lazos misteriosos que nos unen a esos seres queridos. Nos queda su recuerdo, sus aficiones, sus libros, sus anécdotas, y a veces traspasan enigmáticamente la barrera del tiempo y las generaciones. ¡Qué hermoso tener un padre pintor y aficionado a la ópera! ¡Qué bellos recuerdos!

Sarashina dijo...

Amigo Fernando, es verdad que la música tiene un enorme poder de evocación, y que apoya con energía todos nuestros recuerdos. Yo por fuerza tengo la figura de mi padre asociada a la música, rreo que al igual que mis hermanos, dos de los cuales, por cierto, son músicos. Te agradezco mucho tus palabras, porque en esta comunidad ciber es muy agradable encontrar personas sensibles como tú, y otros amigos de la blogosfera con los que tengo una relación tan agradable y humana.

Tienes razón, PMM, en lo del recuerdo transferido a los objetos o a los gustos. En cierto modo, yo aún estoy haciendo el duelo. Recuerdo que mi marido, cuando murió su padre, se hizo arreglar sus trajes de chaqueta, que le costó su buen dinero, pero era algo necesario para sobrellevar la muerte de un ser querido. Es un consuelo mantener aquello que llevaron o que les gustó.

Ay, Charisse, me emocionan tus palabras, de verdad. Yo creo que un padre es un padre, cuando ha sido bueno, la persona que te ha guiado en tus pasos primeros por la vida, y que si, por ejemplo, mi padre hubiera sido otra cosa más común, ahora me acordaría de la gracia con que ponia los ladrillos, o de su sabiduría para hacer documentos legales o lo que fuera. Pero es verdad que el hecho de que esté en la memoria de tanta gente consuela un poco. Como le consolaba a Jorge Manrique que su padre fuera... bueno, aparte de tan valiente y tan buen hombre, el padre de Jorge Manrique... Que risa, vaya una ocurrencia que he tenido.

Eme, cuánto siento tu orfandas en plena juventud. Tiene que ser muy duro, la verdad. Será algo definitivo en la vida de un ser en formación. Si piensas que la persona querida que ha muerto ha cumplido todo su ciclo vital, que te ha visto persona adulta, que ha disfrutado de todo lo que ha podido, y aún así te dueles mucho, qué será cuando eres muy joven y todo eso no se ha cumplido, Un besico.

Sarashina dijo...

Joselu, qué nombre tan precioso tenía tu padre. Es una maravilla que los nietos se acuerden de sus abuelos, incluso si no los han conocido, a través de la tradición familiar. No dejes nunca de transmitir a tus hijas ese amor. Es verdad lo que dices, que tengo muy hermosos recuerdos de mi padre, como todos mis hermanos, que son ocho nada menos, pero ya le decía a Charisse que cuando un padre es un padre todo se vuelve buen recuerdo. Un abrazo.

mariamc dijo...

Bueno, sólo puedo decir que me uno a este duelo. Soy fetichista con las personas que desaparecen a mi alrededor ,guardo recuerdos de amigos perdidos a edades muy crueles, estando llenos de vida, porque nunca los quiero olvidar.Guardo recuerdos de mi padre a través de sus objetos y lo homenajeo cada vez que puedo saliendo al campo a pintar. El gusto por la música es algo familiar que le debemos a él y a mi madre. Aún recuerdo el sonido en su pecho de la canción que nos cantaba para dormir, una muy antigua que también cantaba mi abuela. ¡cosass muy bonitas para el alma!
Gracias por la entrada .

Sarashina dijo...

Brazo cervantino, no es un secreto -bueno, lo era hasta ahora mismo- que compartimos, no los mismos recuerdos, por razones de edad, pero sí muy buena parte de recuerdos. No lo he podido evitar. Sin tragedia, sin drama, pero con melancolía, he tenido que escribirlo. Un abrazo de hermana.

Diego J. dijo...

Amiga, Fuensanta. Conocía tu especial sensibilidad y humanidad, pero esta nota que has escrito me ha reafirmado más en tus indudables valores. Gracias por esta bella música que adorna tu post, y gracias también por evocar la figura de tu padre, una persona a la que no conocía, pero con la que, gracias a ti, tuve el enorme placer de compartir un momento, ¿recuerdas?, el día en que me lo presentaste. Estaba en el salón del hogar familiar, rodeado de cuadros, parte de su vida, y recuerdo que me aleccionó para que, según él, siguiera "manchando el suelo con dibujos", pues le dije que, en mi infancia, tuve una afición al dibujo, que luego he perdido, y que emborronaba el basto suelo de mi casa de siempre con dibujos realizados en tiza.

Quiero acompañarte, siquiera a través de estas letras, y sentir contigo el vacío de la ausencia de un ser querido. Sé lo que se experimenta, pues mi padre murió hace 15 años y, desde entonces, el hogar familiar no es el mismo, sobre todo cuando llegan fechas señaladas como las de Navidad, tan proclives a la nostalgia y al recuerdo.

Recibe un fuerte abrazo

Diego Jiménez, tu amigo.

Sarashina dijo...

Muchas gracias, Diego, por tus palabras y ese recuerdo de mi padre, que me has traído. Sí que eres mi amigo, desde hace mucho, y lo demuestras con discreción pero con sinceridad. Un abrazo.

soy amarillo y azul dijo...

Qué historia y qué foto más interesantes! ¿Cuál era el hombre de tu padre? Apetece buscar más información, imágenes de sus obras...
Un saludo

soy amarillo y azul dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Mal bicho dijo...

Pues para mayor desconsuelo te diré que yo no creo ni que ETA se vaya a acabar pronto, ni que los políticos quieran que se acabe, les conviene para desviar la atención.
Recuerdo ahora la película "El lobo", en la que Eduardo Noriega se hace infiltra en la banda y cuando estan a punto que cogerlos a todos, el gobierno se hace un poco el sueco.

Yolanda dijo...

Mi padre murió de repente hace diez años. El golpe fue terrible porque fue una muerte inesperada y yo me enteré por teléfono. Mi madre murió de cáncer hace poco más de tres años y sigue siendo una fuerte presencia en mi vida. No sé por qué, no puedo utilizar nada suyo, salvo alguna pequeña joya. Me resulta imposible ponerme su ropa o usar sus sábanas o sus toallas.
El recuerdo de mi padre está asociado a las marchas militares, porque él lo era. Yo crecí con las marchas alemanas en un oído y las jotas en el otro. Curiosa mezcla, ¿no?
Con el tiempo los recuerdos se suavizan y el dolor se atenúa. La muerte de los padres supone un punto y aparte, ya no somos "hijos de" sino "padres" a secas, lo que nos pone en primera línea. Las relaciones padres/hijos son las más profundas y conflictivas, al menos las mías lo fueron, pero he llegado a comprenderles y casi perdonarles, aunque lo pasé muy mal durante un tiempo. Las vivencias familiares con frecuencia no son tan idílicas como nos hacen creer. No hay más que ver la cantidad de barbaridades que se cometen entre parientes cercanos. De cualquier manera, para bien o para mal, nuestros padres nos marcan sin remedio. Yo ahora agradezco la formación que me dieron, aunque no he seguido el camino que me marcaron.
Un saludo.
www.unamaestrafeliz.blogspot.com

supersalvajuan dijo...

He leído lo de la vidriera en el diario. Espero tu opinión. ¿Es ese el mejor sitio para ponerla? Chaíto!!!

Sarashina dijo...

Pues sabes, profe, que apenas hay imágenes en la red, porque estamos en la idea de hacer una página dedicada a su persona y a su obra, pero aún no hemos empezado con ello. En mi blog he subido algunas. Te dejaré enlaces en tus comentarios.

Yolanda, la familia es compleja, crea un círculo de relaciones muy estrechas que pueden enredarse de tal modo que al final resulten asfixiantes, sin nombrar las que son enfermizas, morbosas o perversas, De todos modos, parece que hasta el momento no se ha encontrado mejor solución para criar ejemplares humanos o casi. Yo también he tenido, y creo que todos, pero más aún las mujeres, relaciones conflictivas con los padres, pero lo que tú dices, que al final hasta lo comprendes y lo perdonqs.


Super, no sé nada de una vidriera, ahora mismo me voy a mirar los periódicos a ver de qué me hablas y luego te cuento.

Sarashina dijo...

Pues yo a veces pienso lo mismo que tú, Malbicho, y empecé a pensarlo cuando leí la biografía de Lobo y luego vi la peli. Me horroricé de esos intereses creados, de esa infraestructura del terrorismo. No sé, todo se tiene que acabar alguna vez. Y habrá que hacerlo, porque vaya un asco.

soy amarillo y azul dijo...

Clares, por aquí abajo dices: "en el palacio de San Esteban en la exposición retrospectiva, un año antes de su muerte." ¿Hay catálogo de la exposición? Quizá no sea difícil encontrar un sitio donde lo tengan y echarle un vistazo, parece interesante según las muestras que cuelgas. El cuadro de su estudio entiendo que sea de tus favoritos, me ha recordado el taller de carpintería de mi padre, no sé porqué.
Saludos

Sarashina dijo...

Sí hay un catálogo, que editó la Consejería de cultura de Murcia, pero no sé si estará disponible en alguna biblioteca. No sé si habría otra posibilidad, por ejemplo, que yo done un ejemplar a tu instituto. Es lo único que se me ocurre. Ahí abajo tienes mi correo. Si quieres que lo envíe a tu IES, me lo dices y cuando pueda lo hago. Quizás también se pueda pedir a la Comunidad como donación para el centro, pero lo más efectivo sería lo que te digo.

Pilar M Clares dijo...

Qué bonito, Fuensanta, una gelida lagrima.
Muchos besos

La clase imp@sible dijo...

Gracias, Pilar, esa lágrima es común, por el frío, un frío de dos clases, el que hace y el que sentimos. Sin tragedias, pero con melancolía. Un besico.

soy amarillo y azul dijo...

Muchas gracias, Clares, por tu ofrecimiento, pero me da un poco de pudor aceptarlo, la verdad. Eres muy generosa. Un saludo

Sarashina dijo...

No será una molestia, sino un placer, y no te dé apuro, que cuando se ofrece algo es con sinceridad. A mí me daba apuro ofrecértelo a ti personalmente, y creo que sería buena cosa que fuera para tu instituto, Ya sabes, en mi perfil tienes el correo electrónico.

Anónimo dijo...

Clares, hoy he estado viendo el Museo Comarcal de Daimiel y he visto una foto del pintor Juan D´Opazo que me ha recordado enseguida a ésta de tu padre en el andamio.
Me gustó mucho este homenaje que le haces a tu padre.
Un fuerte abrazo de un pintor frustrado.

Anónimo dijo...

Gracias de nuevo por compartir tus recuerdos y por acercarnos cada vez un poquito más la figura de tu padre, que consigues que se vaya haciendo un hueco en nuestras vidas a pesar de no haberlo conocido hasta hace poco tiempo. Yo personalmente creo que la música, al igual que ocurre con la contemplación del firmamento y del mar, son puntos de encuentro y referencia entre personas, independientemente de la distancia espacial o temporal, así que Zuueignung, en este caso, es uno más de los múltiples nexos de unión con tu padre. Enhorabuena a los dos por teneros uno a la otra. Un abrazo.

Sarashina dijo...

Hola, Eusebio, no conozco a ese pintor, pero debe de ser de la quinta de mi padre, si la foto es parecida. Oye, y tú no eres un pintor frustrado, eres un pintor, y ni media palabra más, que lo que he visto en tu blog estás muy bien.

Gracias, Ernesto, por tu comentario y esa sensibilidad fina que siempre muestras. Así es, un nexo más de unión entre padre e hija. Un abrazo.

Unknown dijo...

primero que todo gracias por regalarnos es video la cual hizo que mis lagrimas brotaron, y gracias tambien por permitirnos conocer a tu padre. el hecho de perder aun ser querido te hace mas sensible aun hace casi 13 años perdi al ser mas valioso de mivida Mi Madre desde ese momento mi vida cambio aun no lo supero siemto el dolor como el primer dia por que mi amor por ella aun esta alli tambien desde ese momento la musica es mi manera de desahogar todo lo que tengo atrapado en mi corazon yo reprochado igual que tu pero dios! pero a dios yo pensaba que no podia ser que una persona buena pudiera morir habiendo tanta gente mala en este mundo y estan super de salud todo esto me parecia ilogico pero luego de tres años entendi que dios determino levarla a un mundo mejor, donde no exixte maldad, tristeza ni dolor lo reconozco con la fuerza de mi corazon pero aun sigo sintiendo un gran melancolia, es mentira que el tiempo cura las heridas esta herida aun esta al rojo vivo solo me aferro a los recuerdo y a su enseñanzas aun recuerdo su risa, lo calido de sus abrazos y aun que no lo crean su voz y su olor

Sarashina dijo...

Hola, Karla. Veo que tú también has sentido esa pérdida irrecuperable de las personas que más te quieren en este mundo. Es muy penoso; el dolor se aplaca y se alivia, pero no se acaba nunca. Qué le vamos a hacer. Es la vida, en la cual está, inevitablemente, la muerte. Gracias por visitarme y por expresar tan vivamente tus sentimientos.